Desde los años primeros del siglo XX, en que el poeta José Santos Chocano, nos trajera a nuestra memoria colectiva, el acervo popular del castellano “Vale un Perú”, como sinónimo de las inmensas riquezas de nuestra tierra bendita, acariciadas allende, por la codicia española-europea y que se resume en el siguiente verso: ¡Vale un Perú! Y el oro corrió como una onda. ¡Vale un Perú! Y las naves lleváronse el metal; Pero quedó esta frase, magnífica y redonda, como una resonante medalla colonial…….Ante semejante enseñanza tenemos que aprender que aún nos falta muchísimo por hacer y sobre todo reconocer, que hay peruanos paradigmáticos, como Gastón Acurio que ¡Valen un Perú¡.
Es por eso y estando a diez años de cumplir “el Bicentenario de la independencia del Perú”, traer al recuerdo, la grandeza y la generosidad de aquellos pro-hombres, que como el General José de San Martín, siendo Protector del Perú y con el fin de premiar los servicios hechos a favor de la independencia, creara mediante Decreto, del 8 de Octubre de 1821, el otorgamiento del mérito de “La Orden del Sol del Perú”, gesto altruista que hoy patentiza el Estado peruano para condecorar a sus ciudadanos y a extranjeros que han destacado en campos como las artes, letras, cultura, política y servicios extraordinarios prestados al Perú.
En tal sentido, y considerando que la visión de un nuevo Perú, que viene despertando en nuestro país y ante el mundo, sin parangón en su historia. El ciudadano Gastón Acurio, debe ser galardonado por mandato imperativo del pueblo del Perú, con “La Orden del Sol del Perú”; y conociendo su grandeza, recordar las palabras, con las que acreditaba tan insigne reconocimiento Don José de San Martín:
"He contemplado fundando este privilegio, hacer hereditario el amor a la gloria, porque después de derogar los derechos hereditarios, que traen su origen de la época de nuestra humillación, es justo subrogarlos con otros que, sin herir la igualdad ante la ley, sirvan de estímulo a los que se interesen en ella". "La Orden del Sol, patrimonio de los guerreros libertadores, y premio de los hombres beneméritos, durará así mientras haya quien recuerde los años heroicos, porque las Instituciones que se forman al empezar una gran época se perpetúan por las ideas que cada generación recibe, cuando pasa por la edad en que averigua con respeto el origen de lo que han venerado sus padres".
General José de San Martín
¡Vale un Perú!, es reconocer que; “El Perú es grande”, por que atesora en sus entrañas la reserva de minerales más grande del mundo, de las que sólo hemos explotado el 10 %; por su enorme potencial hidro energetico, con más de 262 cuencas hidrográficas que dan hacia el Pacifico y el Atlántico, y sus 12.000 lagos y lagunas, aptos para la acuicultura y también para la agricultura. Tenemos petróleo, agua y gas, -Los activos estratégicos del futuro-; somos uno de los países más ricos en biodiversidad a nivel mundial, tenemos el mar más pródigo y rico del planeta, con más de 3 mil especies vivas y seremos líderes en gastronomía gracias a Gastón Acurio y farmacología.
¡Vale un Perú!, es reconocer que; somos el primer productor y exportador de espárragos y mangos en el mundo; tercero en uva, y quinto en aguacate o palta; la mayor productividad mundial en lo que se refiere a caña de azúcar, o sea el mayor rendimiento por unidad de producción, constituyéndose en un potencial para la producción de biocombustible como sustituto de los hidrocarburos altamente contaminantes, somos poseedores de la mayor variedad de frutas en el mundo, y en su mayoría originarias de Perú, gracias a su mega - diversidad climática y pisos ecológicos diferenciados; tales como la papaya o lechoza, la piña, el aguacate o palta, el tomate, el maní, la chirimoya, el plátano o banano, la sandía o patilla, la guayaba, la lucma entre otras frutas, sumando un total de 650 especies autóctonas, que se producen en las tres (3) regiones: Costa, Sierra y Selva; poseemos la mayor variedad de granos en el mundo, destacando las leguminosas y gramíneas; en colorantes y tintes naturales, Perú mantiene el liderazgo, no solo por su cantidad sino por su variedad y calidad, convirtiéndolo al mismo tiempo en el primer exportador mundial de páprika, cochinilla y sus derivados, achiote, tara, entre otros tipos de colorantes que son muy cotizados internacionalmente para la industria alimentaria, farmacéutica, cosmética, textil, etc; tenemos el algodón pima de mejor calidad a nivel mundial por la finura y largo de su fibra, tenemos historia, cultura, danzas, folclore y artesanía.
¡Vale un Perú!, es reconocer más allá de las mezquindades que; “El Perú avanza” y seguirá avanzando, venga quien venga, reconocer que crece sostenidamente desde hace 10 años, en promedios que superan el 7.5 del PIB, se mantiene el control de la inflación, su balanza comercial es superavitaria, sus reservas netas están en el orden de los cincuenta mil millones de dólares, nuestra deuda externa se ha repagado y es manejable, sus inversiones crecen cada año a punto de convertirnos en la economía emergente más dinámica de la región y como no, en la más abierta y competitiva a nivel mundial. En el plano interno, el Perú exhibe las mejores cifras sociales de su historia, se han generado más de 1 millón ochocientos mil empleos, se han entregado más de 600 mil títulos de propiedad, se ha reducido en más de 12 puntos la pobreza y lo mismo pasa con la extrema pobreza . No obstante lo dicho, la inmensa mayoría de peruanos, no creen en los políticos, ni en el APRA, así se desprende del Informe de DHU del PNUD – 2005 y en “Los Lineamientos Estratégicos para el Desarrollo Nacional 2010 – 2021”, publicado recientemente por CEPLAN. ¿Qué está pasando?
¡Vale un Perú!; nos demanda con urgencia, la construcción de “una visión de desarrollo compartido del Perú desde el nivel local” con todos los peruanos, sin exclusiones y sin cálculos, en especial de los peruanos capaces y honestos, demanda también el redefinir o recrear, el actual modelo de regionalización y la reafirmación de los espacios locales, distribuidos en sus 1.285.216 km2 de territorio y ser dignos del legado, de nuestro pasado histórico–cultural, al constituir una de las tres (3) culturas milenarias más importantes y admirables que sobrevivieron como organizaciones socio–políticas a nuestra Era Cristiana: la Inca , la Azteca y la Egipcia. Riqueza cultural llena de misticismo que trascendió más allá de sus fronteras, y que después de dos milenios todavía conservan muchas de estas costumbres y tradiciones; además de su aporte a nuestra civilización actual; Tenemos al Cuzco considerada la Capital Arqueológica de América, y el imponente Machu Picchu, una de las siete (7) maravillas del mundo moderno, tenemos “Caral”, Sipàn, Choquequirao, Kuelap, etc. Y el “Boom” del turismo y la gastronomía que ya se asoman en el horizonte de un Perú grande.
¡Vale un Perú!; Hoy en día, es reconocer que tenemos a un GASTON ACURIO, ciudadano simple y común, reconocido chef, que nos engalana anunciando la próxima apertura de la cebichería “La Mar”, en pleno corazón de Manhattan, Nueva York, donde se ubican los mejores restaurantes del globo y señala para orgullo nuestro que, “en ese idílico espacio soñado por cualquier cocinero”, espera hacer “el más hermoso restaurante peruano jamás hecho y así representar a nuestra cultura con honor y excelencia.
Es por todo ello que, Gastón Acurio ¡Vale un Perú!, y como tal y para orgullo nuestro, debería ser nombrado “Embajador del Perú ante el Mundo” porque engrandecerá nuestra gastronomía y el turismo como nunca antes en su historia.
Hace once años escribí este artículo, en el ínterin, el Perú se convirtió en el mejor destino gastronómico a nivel mundial, muy a pesar de que, el COVID19 nos paró en seco por dos años, hoy es clave, para repensar esta ventaja comparativa y convertir al Perú, em una gran potencia mundial en el turismo en general, la agricultura, la nutraceutica, el avistamiemiento de aves y la pesca.
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